Con la presencia de víctimas, organizaciones civiles y gubernamentales, comunidad internacional, campesinos, comunidad indígena Nasa y pobladores de la región, se develó el monumento ´Legado a la convivencia y no repetición del conflicto armado´ en el centro poblado de Gaitania en el municipio Planadas.
El sur del departamento, exactamente Gaitania, es un ejemplo para el país por los acuerdos de convivencia y reconciliación que se han celebrado en este territorio, orientados hacia la paz colectiva en las comunidades y estrechando lazos en medio de las diferencias.
“En el municipio de Planadas, descubrimos cuatro monumentos a lo que se vivió en esta región del sur del departamento del Tolima, también a la resiliencia que han tenido todos los habitantes de este sector, precisamente a la violencia del conflicto armado que sufrieron”, aseguró Alexander Tovar, secretario del Interior, quien además expresó en el transcurso de la entrega del monumento en homenaje a las víctimas y a la no repetición del conflicto armado, “todo el compromiso y apoyo desde el gobierno departamental, para que siga creciendo el progreso y desarrollo para todo el sur departamento del Tolima, a través del Plan de Desarrollo ‘El Tolima Nos Une’.”
“Quiero resaltar a las víctimas, a las mujeres y a todos los que nos acompañaron en este proceso que contó con la participación de las principales comunidades de Gaitania que vivieron la violencia con la creación de las Farc – EP. Esta región ha logrado y acogido tres grandes acuerdos: el firmado entre los indígenas Nasa y las Farc el 26 de julio de 1996, el Acuerdo de Paz de La Habana, y el ´Tercer Acuerdo´, una marca de café entre excombatientes, indígenas Nasa y caficultores. Este monumento fue la excusa para lograr un proceso que hoy da resultados. Quisimos plasmar en esta obra el deseo de convivencia de cada uno de los que acá habita”, aseguró el comisionado, Carlos Guillermo Ospina, de la Comisión de la Verdad.
Esta expresión artística busca ser un referente visible del diálogo social generado en este territorio, un homenaje a las víctimas del conflicto armado, está construido a cuatro caras sobre piso y siluetas en láminas de hierro de alto calibre, con cortes a láser y acabados en forja artística.
Durante la develación del monumento y sus tres estaciones, los indígenas Nasa realizaron un ritual de armonización y ambientación con el grupo juvenil de chirimía. Posteriormente, la comisionada Patricia Tobón, dio lectura al pacto por la convivencia que estuvo firmado por los firmantes del Acuerdo de Paz, Gobernación del Tolima, Defensoría del Pueblo, Alcaldía municipal entre otros.
El cierre del espacio estuvo a cargo de artísticas musicales y presentaciones culturales que buscan visibilizar el arte como elemento transformador para la paz y la construcción de la convivencia pacífica.