#VitaminaEspiritual💊
7 Victorias que se obtienen a través de la Oración.
3- Victoria sobre el enemigo
En nuestra vida cristiana nos vemos enfrentados a tres enemigos: la carne, el mundo y el diablo, muchos se atemorizan y creen que pueden ser derrotados fácilmente pues por tradición se cree que no hay nada que se pueda hacer ya que el mal abunda por todos lados, pero la verdad es muy distinta porque nuestro adversario ya ha sido derrotado por el más Grande e Invencible Rey y Señor «Jesucristo», el cual nos ha dado autoridad para vencerlo. En está oportunidad la palabra nos enseña dos de las armas que tenemos para vivir una vida en victoria, la primera es el «Sometimiento» a Dios, esto nos lleva a entender el permitir que nuestra voluntad sea doblegada ante la Suya, reconocer su Señorío y Soberanía en todo y por consecuencia la obediencia a Su palabra.
Cuando adoptamos este orden nuestro ser comienza a sincronizarse con el pensamiento de Dios y alinearse con Su buena, agradable y perfecta voluntad; todo empieza a tomar un nuevo curso frente a nuestros ojos, el sometimiento inicia en el mismo momento que reconocemos que somos nada más que polvo; debemos entender que el sometimiento a Dios no es algo que uno hace una vez a la semana sino que a diario debemos mirar nuestro corazón a través del espejo de Su Palabra y Sus enseñanzas. Si podemos doblegar el corazón a los mandatos divinos, Dios pondrá a nuestra disposición todo su ejército celestial. Él, nuestro creador que todo lo puede y todo lo sabe, en nuestra relación diaria a través de la Oración nos brinda esa dirección, sabiduría y cobertura para contrarrestar las asechanzas del adversario.
En ese diálogo permanente nos serán reveladas las intenciones, trampas y mover del enemigo, como también La fortaleza, el dominio propio y el poder para permanecer firmes ante sus ataques, por eso la segunda de las armas para tener victoria frente al enemigo es «Resistir» y es esa determinación de no ceder pese a sus intenciones, presión está en la comunión permanente y Oración con Dios que permitirá una capacitación eficaz y arrolladora para hacer retroceder al enemigo; podemos resistir al adversario cuando sabemos lo que Dios enseña en Su Palabra; aunque el enemigo ataca a través de los pensamientos, podremos identificar cómo operan para erradicarlos de nuestras vidas.
Leamos hoy: Santiago 4:7
Someteos, pues, a Dios; resistid al diablo, y huirá de vosotros.
Digitado y Editado por:#JulianchoMerchán
Bendiciones!