#Vitamina Espiritual 💊
Lo que necesita un modelo realmente…
Vivir como Cristiano no será siempre como los tranquilos días de primavera. Incluyen el envejecimiento, las enfermedades y la muerte. A pesar de todo esto, el Señor nos ha llamado a que seamos «modelos» que demuestran los pensamientos y actitudes de Cristo aún en esas circunstancias. Hay entrenamientos que todo Cristiano debe experimentar para vivir como tal.
En el mundo y en el concepto de ser o estar «fashion» lo más importante para todo «modelo» es bajar de peso, la publicidad y los medios de comunicación durante la historia nos mostraba que los hermosos no eran raquíticos, sino que eran robustos y buen mozos. Pero desde que aparecieron los «modelos» como profesión, ha cambiado la imagen de una persona hermosa. Esto se debe a una simple razón y es que el mundo y la moda están más interesados en la apariencia y la imagen desde el punto de vista común de un diseñador porque así permiten resaltar al 100% la ropa que ellos producen. Así como los modelos profesionales bajan de peso para mostrar la ropa de los diseñadores, nosotros también debemos hacer lo mismo como Cristianos; bíblicamente podemos hacer referencia a esto como «la negación de sí mismo».
El parámetro de está negación es la Palabra del Señor. Debemos entrenarnos en negarnos a nosotros mismos ante su palabra, para que resalte solamente Su Verdad y no nosotros mismos, ya estamos cansados de tanto modelo distorsionado que sólo pretende resaltar una apariencia vana cuando lo que más importa y tiene un valor indescriptible es la esencia de Cristo en nuestro ser; la vida es realmente hermosa, cuando nos negamos a nosotros mismos y somos canales de la Palabra de DIOS.
Leamos hoy: 1 Corintios 11:1-3
Sed imitadores de mí, así como yo de Cristo. Os alabo, hermanos, porque en todo os acordáis de mí, y retenéis las instrucciones tal como os las entregué. Pero quiero que sepáis que Cristo es la cabeza de todo varón, y el varón es la cabeza de la mujer, y Dios la cabeza de Cristo.
Por: #JulianchoMerchán
Bendiciones!
