El presidente de Rusia, Vladímir Putin, es conocido en su país por su peculiar sentido del humor. Con motivo de su cumpleaños número 69, te invitamos a repasar algunas de sus bromas más sonadas.
Sobre los afrodisíacos
En 2019, durante una reunión con los agricultores, un granjero le dijo a Putin que los caracoles son un potente afrodisíaco natural. Putin respondió que su producción podría ser la solución de la crisis demográfica que vive el país.
Agregó que también le vendrán bien al ministro de Agricultura, Dmitri Pátrushev, que ya es padre de seis hijos.
Sobre el envejecimiento
Durante una de las tradicionales líneas directas, un niño le preguntó a Putin qué hacía de pequeño cuando le obligaban a comer avena. El mandatario ruso respondió que es un gran fan de este plato.
Sobre sus raíces extraterrestres
Luego de que el presentador de la Línea Directa le preguntara en broma si era un alienígena, Putin respondió que tiene pruebas y testigos de que no lo es.
Sobre la burocracia en Rusia
En 2011, Putin ilustró el problema de la burocracia en Rusia con un chiste.
Sobre la producción energética en Europa
En 2010, Putin auguró la crisis energética por la que está pasando Europa. En el Foro Económico de Berlín, el mandatario se sorprendió con la negativa de Alemania de desarrollar la energía nuclear y que si no quieren comprar el gas ruso, algún día tendrán que "calentarse con una chimenea de leña".
Sobre el regreso de Alaska
Alaska, que ahora forma parte de EEUU, se encontraba bajo el control del Imperio ruso entre los años 1799 y 1867. Luego Rusia se la vendió al país norteamericano.
Una jubilada le preguntó a Putin si existía la posibilidad de que Alaska volviese a ser rusa, igual que hizo la península de Crimea en el 2014."Faína Ivánovna, cariño, ¿para qué necesitamos Alaska?".Explicó que el 70% del territorio ruso se ubica en el norte y en el extremo norte.