Trabajaba como decoradora cuando, con su mirada artística y detallada, se fijó en el paso de las plataformas decoradas en los desfiles del Festival Folclórico. Su interés la impulsó a capacitarse con los mejores en la materia y luego a emprender el trabajo de su vida, apostándolo todo a crear pequeños universos de colores a bordo de grandes carros que llevan consigo a las representantes de la belleza y el folclor colombiano.
Soñar, diseñar, planear, cortar, pegar, esculpir, volver a cortar y pegar; pintar, pulir, armar, revisar y rodar. Toda una hazaña artesanal se vive en el taller de Martha, días previos a los tradicionales desfiles de San Juan y San Pedro. Junto a más de 30 personas, trabaja contrarreloj en cada detalle de las esperadas carrozas.
Sus obras son fáciles de identificar porque involucran elementos de la naturaleza, como flores y animales, además del personaje principal que representa temas del folclor nacional.
Para la versión 50 del Festival, el carruaje alegórico del Tolima Corazón de los Andes está en manos de la experimentada artesana, quien asegura que la puesta en escena implica una gran responsabilidad. “Es mucho turismo lo que podemos mostrar en el Tolima. La carroza lleva el Nevado del Tolima… Tenemos un personaje al que vamos a homenajear y es el Guardián del Cañón del Combeima”, destacó Martha, luego de manifestar que el avistamiento de aves y otros temas propios del departamento serán parte de esta propuesta.
Así como Martha, otros artesanos y sus equipos de trabajo avanzan en la creación de las carrozas que aportarán color y magia a la fiesta que convoca todas las expresiones folclóricas de Colombia.