En un esfuerzo por mantener un entorno urbano amigable y regulado, la Alcaldía en conjunto con la Personería Municipal y la Policía Metropolitana, han intensificado los operativos de control de ruido en las áreas comerciales de la ciudad.
En esta oportunidad, las acciones se realizaron en la zona de la carrera Tercera, entre las calles 10 y 15, donde se realizaron cinco suspensiones temporales de actividades comerciales debido a que estos establecimientos superaban los niveles permitidos según la Resolución 06-27 de 2006.
“Estamos realizando verificaciones y controles. Además, se impusieron medidas correctivas a dos vendedores ambulantes que utilizaban parlantes con niveles de ruido superiores a lo permitido”, señaló Mateo Flórez, ingeniero de sonido de la Alcaldía.
Las suspensiones de los establecimientos se fundamentaron en el artículo 93, número 3, de la normativa vigente, y tendrán una duración de tres días. Por su parte, dos vendedores ambulantes recibieron comparendos monetarios, conocidos como multas tipo 4, que deberán ser pagados lo más pronto posible para ser retirados del sistema.