Amor por el Tenis fue lo que surgió desde muy pequeña para la deportista Carol Mora, cuando apenas tenia 4 años de vida comenzó a practicar este deporte gracias a su papá que además es su formador.
El Club Campestre de Ibagué se convirtió en su segunda casa, las jornadas empezaban muy temprano, ya que Carol estudiaba de 6:00 de la mañana a 1:00 de la tarde y en las tardes las dedicaba a entrenar. Por otra parte y al culminar la etapa de bachillerato, Carol accedió a una beca deportiva en los Estados Unidos, pues consideraba que no contaba con los recursos suficientes para intentar ser tenista profesional hasta ese momento.
La menor de las hermana de la familia Mora confiesa que le gusta ganarles a los hombres, que en algunos casos la duplican o triplican en edad, lo disfruta, aunque algunas veces se le dificulta porque son muy hábiles y estratégicos.
Entrena de lunes a sábado, y los domingos se dedica a descansar, aunque también va a la iglesia y aprovecha para practicar otros deportes como el fútbol o el baloncesto. Sin embargo, señala que a la capital musical de Colombia le faltan más canchas para la práctica del deporte blanco.